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Biofumigación con acolchado plástico e incorporación de materia orgánica y organismos antagónicos para el manejo ecológico de plagas
BLANCA LUCERO MARTINEZ HERNANDEZ
Acceso Abierto
Atribución-NoComercial-SinDerivadas
Agroplasticultura
En la agricultura moderna, se ha soslayado la sustentabilidad de la producción agrícola, ya que el uso de agroquímicos sintéticos ha permitido obtener incrementos substanciales en la producción; no obstante, sus efectos adversos están impactando de manera significativa la sustentabilidad de la agricultura. La práctica del monocultivo y la contaminación por el uso indiscriminado de pesticidas han reducido la biodiversidad de los agroecosistemas, causando la inestabilidad de los mismos, lo cual se manifiesta, en una mayor incidencia de plagas y enfermedades en los cultivos, entre otros efectos nocivos. Esto y los problemas de seguridad y salud pública inherentes a la fabricación y uso excesivo de agroquímicos como el bromuro de metilo (BM) han conducido a la búsqueda y establecimiento de alternativas de manejo de plagas y enfermedades. Así surge el interés por el control ecológico que puede definirse como: "cualquier forma de control que reduce la incidencia o severidad de la enfermedad, o incrementa la producción del cultivo, aun cuando no haya aparentemente un efecto significativo en la reducción de la enfermedad o inóculo, y su impacto nocivo en el ambiente sea mínimo o nulo" (Zavaleta-Mejía, 2003). El BM ha sido el producto químico más ampliamente comercializado para la fumigación de suelos ya que se considera que es un producto económico debido a sus propiedades como gas fumigante de alta eficacia y rápida actuación en el control de enfermedades de origen edáfico, mostrando un amplio espectro de actividad frente a los patógenos. Sin embargo el BM no se retiene en su totalidad en el suelo, sino que entre 50 a 95% pasa en forma de emisiones gaseosas a la estratosfera, donde se liberan átomos de bromo que reaccionan con el ozono y otras moléculas estables que contienen cloro, dando lugar a una reacción en cadena que contribuye a la disminución de la capa de ozono, e incrementa el paso de rayos ultravioleta, además de que una de las principales desventajas de este producto radica en su toxicidad, reduciendo la biodiversidad del suelo y provocando problemas de fitotoxicidad y contaminación que afectan a humanos y ecosistemas Brechelt (2001).
Por tal motivo con base en el Protocolo de Montreal el BM deberá ser eliminado del mercado mundial en el año 2015. Por esta razón, es urgente desarrollar técnicas como la biofumigación, que sean amigables con los ecosistemas y que permitan eliminar las plagas del suelo y maleza basados en los principios biológicos y fisicos. Este tipo de tecnologías son la que habrán de predominar en el futuro y las que serán alentada para usarse en programas de agricultura orgánica y sustentable en México y todo el mundo (Lira-Saldivar et al., 2004). En lo referente a la biofumigación como alternativa al BM, la materia orgánica a través de sus procesos de biodegradación supone una prometedora alternativa en la regulación de los patógenos del suelo. La biodegradación de la materia orgánica está basada en los mismos principios de los biofumigantes que el BM, la única diferencia se encuentra en que la biofumigación utiliza los gases y otros productos resultantes de la biodegradación de la materia orgánica y residuos agroindustriales. Por otra parte, la efectividad de la biofumigación es similar a la de otros pesticidas convencionales, pero al mismo tiempo mejora las propiedades fisicas, químicas y biológicas del suelo. Cuando se emplea la biofumigación, la acción de los microorganismos sobre la matería orgánica produce una gran cantidad de productos químicos durante su descomposición, entre los que se encuentran: amonio, nitritos, ácido sulfhídrico, un gran número de sustancias volátiles y ácidos orgánicos (Bello et al., 2003). En los últimos años la técnica de biofumigación de suelos se ha venido utilizando cada vez más en diversas regiones del mundo como un método ecológico para la prevención y control de organismos fitopatógenos del suelo, la cual utiliza la solarización con acolchado de polietileno transparente y la incorporación al suelo de residuos de especies de plantas de la familia de las Brassicaceas, las cuales debido a las altas temperaturas generadas con la solarización del suelo liberan diversos compuestos tóxicos con propiedades biocidas.
2007
Trabajo terminal, especialidad
CIENCIAS AGRARIAS
Aparece en las colecciones: Casos de estudio

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